Bienvenido querida lectora o lector. Hoy continuamos a profundizar sobre la retención hídrica, pero iniciando esta vez desde la parte inferior del cuerpo: hablaremos de la hinchazón en pies y tobillos. Te habrá sucedido alguna vez de sentir calor y entumecimiento en los pies después de pasar horas en una posición estática o hasta quizás llegar al final del día con los tobillos hinchados. Don’t worry. Acá te explicaremos como intervenir.
Muchas veces se justifica banalmente la hinchazón y la fatiga de las extremidades inferiores debido a su función de soporte a todo el cuerpo. Después de largas horas de trabajo sentados en nuestros escritorios, de pie en una tienda o de periodos estresantes, en los cuales nos dejamos llevar y sucumbimos a los malos hábitos, el pensamiento va al cansancio o a la fatiga y no al esfuerzo al cual sometemos nuestro sistema linfático. Es importante tomar conciencia de nuestros límites y de nuestras características físicas para evitar que un simple síntoma se pueda transformar en un trastorno real, además será primordial equiparse con los instrumentos correctos.
Tómate unos minutos y juntos entenderemos:
- ¿Por qué los pies y los tobillos se hinchan?
- ¿Cuáles son las causas principales de la hinchazón?
- ¿Cuáles son las personas más propensas a sufrirlo?
- ¿Puede la hinchazón en los tobillos ser una alarma de algo más grave?
- ¿Por qué la compresión graduada es un aliado válido contra los tobillos hinchados?
¿Por qué los pies y los tobillos se hinchan?
¿Os ha sucedido alguna vez que estáis en la misma posición por tanto tiempo y posteriormente comenzáis a sentiros incómodos en cualquier posición? Quizás sentados en la oficina, en un avión o en la cola para la facturación. Imagino que no lo habéis relacionado rápidamente con la molestia percibida por el sistema linfático, sin embargo, es exactamente esto lo que ocurre. La correcta circulación, ya sea sanguínea o linfática, es influenciada por nuestro estilo de vida y por nuestros hábitos, incluidos hasta aquellos más simples.
El movimiento del cuerpo favorece la oxigenación y el retorno de la sangre al corazón. Gracias a la gravedad, mantener por tanto tiempo una posición estática provoca un aumento de la presión venosa. El esfuerzo máximo se origina al nivel del tobillo, la parte del cuerpo en la cual se evidencia la fatiga del sistema linfático. Los líquidos que no se drenan correctamente se depositan en el tejido, que acumulándose provocan un edema, es decir, una hinchazón.
¿Cuáles son las causas principales de la hinchazón?
La hinchazón es también conocida como retención hídrica: las sustancias de descarte transportadas por los fluidos tienden a depositarse, alterando el metabolismo celular y provocando reacciones desagradables como la hinchazón o el entumecimiento.
La inamovilidad prolongada no es la única condición que conlleva a la acumulación de líquidos y a la consiguiente hinchazón de pies y tobillos. Lo mismo puede suceder después de sufrir un trauma físico o pudiera estar relacionado con la presencia de patologías clínicas. De igual manera, el consumo de fármacos puede comprometer la microcirculación.
La hinchazón es capaz de afectar ambos tobillos y pudiera estar asociado al aumento de la presión capilar, a la insuficiencia venosa o a otra tipología de problemas relacionados con la inflamación de las articulaciones. Cuando la hinchazón se presenta en un solo tobillo por lo general se debe a traumas o problemas de las articulaciones o a los vasos sanguíneos.
¿Cuáles son las personas más propensas a sufrirlo?
Las personas con mayor tendencia a sufrir hinchazones en pies y tobillos son:
- Personas mayores
- Personas con sobrepeso
- Mujeres embarazadas
- Personas con venas varicosas
Estos son los escenarios más comunes en los cuales el organismo resulta alterado y por ende sujeto a un esfuerzo excesivo. Como podéis ver, la posibilidad de pertenecer a uno de estos grupos de personas es alta, como también lo es la posibilidad de sufrir problemas de retención hídrica.
¿Puede la hinchazón en los tobillos ser una alarma de algo más grave?
En el caso de que la hinchazón se demuestre un síntoma persistente, es aconsejado contactar al médico para un diagnóstico preciso. Si se trata de una condición pasajera, no hay de que preocuparse, solo será necesario tomar algunas precauciones y estar atentos a nuestros hábitos.
Las enfermedades que se pueden asociar a la hinchazón de los tobillos son:
- Cirrosis
- Embolia
- Insuficiencia renal
- Insuficiencia venosa
- Linfedema
- Enfermedades reumáticas
- Insuficiencia cardíaca
- Trombosis y trombosis venosa profunda
- Venas varicosas (varices)
Si los tobillos se presentan además de hinchados, enrojecidos, calientes y si se manifiesta fiebre, es aconsejado contactar a un médico. Las mujeres embarazadas también deberán contactar al médico en caso de que la hinchazón se presente de forma espontánea o si se asocia a otros síntomas.
¿Por qué la compresión graduada es un aliado válido contra los tobillos hinchados?
La compresión graduada ayuda a prevenir los trastornos asociados a la circulación sanguínea y linfática, pero es también de gran ayuda para quien sufre de diversas patologías. En caso de pies y tobillos hinchados producto de la retención hídrica, la compresión graduada mejora el retorno circulatorio y ayuda a la eliminación de la hinchazón.
Asegurarnos de nuestra salud y bienestar no debe ser un esfuerzo: incorporar solo algunos pequeños hábitos en nuestra rutina será suficiente para no preocuparnos. Nuestros productos son estudiados justamente para acompañarte durante todo el día, en todas las ocasiones, siempre respetando la salud.
Bibliografía
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